Junio 22 de 2020.- El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus, solicitó este lunes aumento de la producción mundial de dexametasona para usarla en la lucha contra el covid-19.
Según el organismo, los ensayos clínicos iniciales muestran que este fármaco tiene potencial para salvar vidas de pacientes con covid-19 gravemente enfermos.
«Aunque los datos aún son preliminares, el reciente hallazgo de que la dexametasona esteroidea tiene un potencial que salva vidas en pacientes con COVID-19 en estado crítico nos dio una razón muy necesaria para celebrar», destacó el director en conferencia de prensa.
“El próximo desafío es aumentar la producción y distribuir dexametasona de manera rápida y equitativa en todo el mundo, centrándose en dónde más se necesita”, agregó.
Científicos de Reino Unido afirmaron haber hecho «un gran avance» en el tratamiento de enfermos con covid-19 al comprobar que el fármaco reduce en aproximadamente un tercio la tasa de mortalidad de los pacientes con ventilación artificial.
«La demanda ya ha aumentado, después de los resultados del ensayo del Reino Unido que muestran el claro beneficio de la dexametasona. Afortunadamente, este es un medicamento barato y hay muchos fabricantes de dexametasona en todo el mundo, en quienes confiamos para poder acelerar la producción», subrayó Tedros según comunicado.
La OMS enfatiza que la dexametasona solo debe usarse para pacientes con enfermedad grave o crítica, bajo estrecha supervisión clínica. «No hay evidencia de que este medicamento funcione para pacientes con enfermedad leve o como medida preventiva, y podría causar daño», alerta la organización.
El director señaló la importancia de verificar la autenticidad del fármaco «También es importante verificar que los proveedores puedan garantizar la calidad, ya que existe un alto riesgo de que productos de calidad inferior o falsificados ingresen al mercado».
Además, ha destacado que los Gobiernos deben trabajar juntos para garantizar que se dé prioridad a los suministros para los países con un gran número de pacientes gravemente enfermos, al tiempo que el fármaco sigue estando disponible para otros enfermos que lo necesiten.
